lunes, 19 de abril de 2010

Caballeros Medievales







La imagen romántica de los caballeros medievales que vivían entregados a fabulosas aventuras y fieles a un estricto código de honor, no está alimentada sólo por la literatura de los cantares de gesta o por sagas como la del Rey Arturo, sino también por algunos pocos personajes históricos cuyas andanzas cobraron estatura mítica.Durante centurias los niños franceses escucharon encantados las hazañas, los dichos y hechos del condestable Bertrand Duguesclin, uno de los grandes héroes de la Edad Media, el cual recibió de su rey el encargo de expulsar a los ingleses del territorio de Francia en el siglo XIV.Sus actos de arrojo y sus muestras de piedad sólo eran comparables a la arrogancia con la que rubricaba sus palabras. Hecho prisionero por el Príncipe Negro, le pidió éste que él mismo fijase el precio de su rescate. "Cien mil libras" -contestó Duguesclin sin vacilar, una cifra formidable para aquellos tiempos. Maravillado, el Príncipe Negro le preguntó de dónde sacaría tamaña fortuna. El condestable repuso con inconmovible seguridad: "No hay muchacha en Francia que no esté dispuesta a tejer una rueca llena para pagar mi rescate". En efecto, al poco tiempo, los franceses pagaron el rescate hasta la última moneda.El condestable era un guerrero a las órdenes de la realeza, no un caballero andante que salía por el mundo a "desfazer entuertos"; pero se dice que jamás cometió tropelías que dañasen su honor y, más aún, predicó la defensa y el respeto a los códigos de caballería en cada oportunidad. Entre los dichos que se le atribuyen, están el de que "de nada vale ganar una batalla y perder el alma". O las palabras que habrían constituido su regla de oro: "Nunca olvides, dondequiera que hagas la guerra, que el clero, las mujeres, los niños y los pobres no son tus enemigos".

cruzada en la edad media imagenes







Cruzadas en la edad media

Las cruzadas fueron una serie de campañas militares comúnmente sostenidas por motivos religiosos llevadas a cabo por gran parte de la Europa latina cristiana, en particular, de los francos de Francia y el Sacro Imperio Romano. Las cruzadas con el objetivo específico para restablecer el control cristiano de Tierra Santa se libraron durante un período de casi 200 años, entre 1095 y 1291. Otras campañas en España y en Europa oriental continuaron hasta el siglo XV. Las cruzadas fueron sostenidas principalmente contra los musulmanes, aunque también varias campañas se hicieron contra los eslavos paganos, judíos, los cristianos ortodoxos griegos y rusos, los mongoles, los cátaros, husitas, valdenses, prusianos, y principalmente a los enemigos políticos de los papas. Los cruzados tomaron votos y se les concedió la penitencia por los pecados del pasado, a menudo llamada como indulgencia.